Viviría para siempre entre los pliegues de tu piel cuando te relajas contra mi cuerpo, después de hacer el amor.
En los aleteos de tus pestañas, buceando entre los colores que danzan en tus iris.
Me mudaría sin pensar a la suavidad de tus labios, en la curva de tu sonrisa, entre los recovecos de esa risa grave, ronca y cálida con la que me gustaría endulzar el café por las mañanas.
Alfombraría el suelo de nuestra ropa, de mis inseguridades y tus miedos, y haría muros de todos los te quiero que nos quedan por decirnos, porque solo así serán lo bastante altos para guarecernos de los celos y la inquina de los demás.
Donde no eche de menos la caricia amable del sol, porque ya tenga las tuyas.
Donde la luz de la luna parezca anodina, si se compara con tu resplandor.
Donde la vida se abra paso con dificultad en el tiempo que se consuma ante nuestros jadeos de amor.
Y en ella seguiremos siendo nosotros
ResponderEliminarPorque esta es nuestra fortaleza y donde nos sentimos seguros
Nadie podrá con ella y nosotros, seremos los únicos que tendremos las llaves
Gracias por seguir, por caminar, y por todo lo que me aportas cada mañana que me despierto a tu lado❤️