jueves, 23 de mayo de 2019

Help.

No sé qué me pasa pero quiero que pare. No sé si son las pastillas, el estrés o mi puta locura de serie, pero me siento una mierda y no paro de llorar por todo. Lo odio, quiero recuperar mi control, quiero sentirme capaz y eficaz, pero en lugar de eso yo solo me siento inútil y gorda y fea y vaga. Necesito un solo día en que me encuentre bien, porque de los últimos tiempos solo me queda tristeza y pocos propósitos. No sé qué ha sido de mis proyectos, mis aficiones y mis ganas de vivir. Necesito tiempo o me moriré. Necesito darle escapatoria a todo mi dolor. Necesito algo que me apetezca, que me haga ilusión, que me haga feliz. De dos fines de semana al mes no puede vivir nadie.
Que alguien me ayude, por Dios, que alguien me ayude...

lunes, 20 de mayo de 2019

Revealed

Estaba tan frustrada y tan enfadada...
Porque mi cuerpo no fuera como los demás, porque todo me saliera siempre mal y por tener que pasar por tanto malestar físico y tantas preocupaciones. Me preguntaba por qué solamente yo.
Al principio era una mera inquietud por nuestra salud sexual, pero si no lo hice antes es porque, para mí, dejar que alguien se corriera en mi interior es algo sumamente íntimo. Me daba miedo dejar que alguien me marcase de esa manera. Pero, tratándose de él, de alguna forma me he obcecado en darle todas mis primeras veces restantes para compensar por las que no he podido tener con él. Sin embargo, una parte de mí querrá siempre rebelarse contra las convenciones sociales y eso es lo que hay, así que estaré luchando eternamente con mi lado romántico y preguntándome por qué algo tan natural y simple me importa tanto.
De manera que no pude evitar crearme muchas expectativas para cuando el momento llegase, dibujando mil escenarios pastelosos en la mente, y quizá la primera y la segunda vez no se correspondieron del todo a las fantasías que me había montado, pero... Pero al final lo entendí. Lo entendí cuando me sonrió, con los ojos brillantes y su jugosa boquita torcida, y me dijo que me sentía palpitar a su alrededor; y se me confirmó cuando contrajo la cara, susurrando que se corría, y se hundió en mi cuello para calentarme la piel con sus jadeos temblorosos, totalmente vulnerable, completamente mío.
Comprendí que había roto todas las barreras, que me moriría por sentirle dentro el resto de mi vida, que valdría la pena hacer cualquier cosa por él, que se me rompería la vida si se marchaba, que querría ver esa expresión todas las noches hasta que me muriera con la certeza de que todo lo que haga por él es bonito, puro y de verdad. 

miércoles, 15 de mayo de 2019

Adicciones.

Este libro es malo para mí. Es malo porque estoy cansada, tensa y triste y esta historia desbloquea recuerdos que no quiero y no necesito revivir.
Recuerdos añejos, teñidos de polvo y abandono. Sensaciones malignas, la incertidumbre, la desconfianza, el andar siempre buscando algo a sabiendas de que no me iba a gustar lo que encontrase, intentando evitar un final que nos barrió de todas maneras. Vivir con miedo no es sano.
No, no pienso volver ahí.

martes, 7 de mayo de 2019

Oysters.

Sé que para aquellos que me acaban de conocer, e incluso para quienes lo hacen desde hace más tiempo, es fácil pensar que soy una persona social y extrovertida. No es verdad. Se me da bien poner una cara amable durante un rato para establecer relaciones nuevas que van a quedarse en nada..., pero cuando se trata de hacer amigos de verdad es mucho más difícil. Tanto, que yo no tengo de eso.
También me resulta complicado expresar mis emociones, por eso creé mis blogs, son una manera de expresarme y poner en orden lo que está dentro de mi cabeza, pero ahora ya no tengo tiempo para nada, y me encuentro dejando pensamientos a medias porque es demasiado difícil indagar en lo que verdaderamente me incomoda. Que es todo.
Si hablo en inglés, por ejemplo, no hay ningún problema. Es una lengua mucho más racional para mí, no está ligada a mis emociones, de manera que aquellas cosas que me hacen sentir mal son mucho más fáciles de concretar en otro idioma. Aún así, sé que tiendo cada vez más a enterrar la pena, pretender que todo va bien y poner una cara triste cuando se me olvida mantenerme contenta. De todas formas, cualquier excusa cabe en mis caras serias y el noventa por ciento de las personas se lo creen. Se creen que todo va bien.
Y mientras, yo... al ostracismo sentimental.