Bueno, realmente soy una ignorante y no una inculta, pero para qué voy a matizar el rico significado de mi lengua si las letras son "inútiles". Pero a lo que vamos:
Es cierto, no recuerdo cómo funcionaban las resistencias ni la corriente alterna. No llegué a dar los algoritmos. Era muy buena en física, pero no recuerdo cómo hacer cálculos de velocidades, fuerzas y volúmenes desalojados. También me falta muchísima cultura general en cuanto a personajes destacados y sus descubrimientos. No recuerdo cómo era la formulación orgánica...; Al fin y al cabo, son cosas que estudié hace mucho tiempo y que olvidé, en parte porque no todo me interesaba, en parte porque no las he usado para nada.
¡Ah, bueno! recuerdo cómo funcionan las leyes de Mendel, la replicación celular y la mayoría de las cosas que di en biología. Incluso recuerdo que la mosca de los ejemplos era una Drosophila Melanogaster. Pero se me olvidaba que "eso no vale, porque la biología me gustaba y además es la parte de las letras dentro de las ciencias".
O sea, que si sé lo que sé porque me gusta, no vale. Ok.
Sea como fuere, siempre se adquiere una idea general de lo que se estudia. Por ejemplo, aún sé resolver ecuaciones aunque no haya hecho una desde los 15 años, pero no recuerdo la teoría de los límites, ni sé hacer raíces cuadradas de memoria. Pero sé que son cosas que puedo recordar si me hacen falta. Y no solo eso, sino que tengo los recursos necesarios para mi día a día.
En otros aspectos sé que no. Aunque se me daba bien la física, casi nunca pienso en cómo desplazar un gran peso con menos esfuerzo y cosas por el estilo. Tampoco sé nada de mecánica, informática, tecnología o electrónica; aunque soy consciente de que es un conocimiento importante.
Así que hay varias cosas que quiero que sepáis:
1. Estoy hasta las narices de que menospreciéis mi conocimiento porque se ajusta al campo que me gusta, que es el de las humanidades. Sí, me sé algunas fechas en arte y literatura (aunque no tantas en historia), pero ese conocimiento es "inútil"... sin embargo, GUESS WHAT, a mí no me resulta más útil saberme las tres leyes de Kepler, o en qué año se inventó la bombilla, o la vida y obra de Newton que a vosotros saberos las características generales de la escuela florentina en el renacimiento. La culturilla general, a efectos prácticos, solo sirve para que los demás se generen una determinada opinión sobre ti, y yo ya sé cómo soy y no me importa qué piensen o dejen de pensar (además de que me llevo muy bien a la gente a mi terreno). Todos tenemos campos en los que flojeamos y este es el mío.
2. Todos olvidamos algunas de las cosas que hemos estudiado. Uno de mis profesores me dijo una vez que lo importante no es tanto la información como saber crear las herramientas necesarias para poder desenvolverse en cualquier situación, y poder acudir al conocimiento cuando sea menester. Y estoy bastante segura de que soy lo bastante inteligente como para hacerme con los recursos y conocimientos que me sean necesarios cuando me sean necesarios, porque la mejor ventaja de ser yo es que puedo aprender lo que sea, siempre y cuando me interese o me sea necesario.
3. ¿No se dice que siempre salta el cojo de la pata que cojea? muchos de los que estáis siempre criticando el campo de conocimiento de las humanidades tenéis exactamente el mismo problema que nos atribuís, pero en sentido inverso. Me he encontrado a muchos brillantes físicos, futuros matemáticos e informáticos que no sabían componer frases gramaticalmente correctas en su propio idioma, ni habían leído casi ningún libro, ni sabían nada de historia. Pero, ¿vosotros no sois ignorantes? no, porque saber sobre historia, economía, geografía, idiomas, literatura, arte o filosofía es inútil. Os importa más cómo funciona el mundo que cómo funcionan los seres humanos, lo cual dice mucho de vosotros.
4. Tiene que haber especialistas para todo, mis queridos lectores. Necesitamos a los profesores tanto como a los médicos. Necesitamos quien idee y cree las máquinas que nos facilitan la vida y nos permiten mantenernos en contacto o desplazarnos, como necesitamos al periodista que nos ayuda a mantenernos informados, al artista que crea las obras que nos hacen pensar y al músico que compone nuestras piezas favoritas. Necesitamos a la gente de arte, también, nuestros pintores y actores, necesitamos a quienes programan nuestros ordenadores, a los que documentan la historia e investigan los hallazgos y a los que nos traducen los manuales, los textos, los libros; como también necesitamos a quienes investigan el universo en busca de respuestas o a los arquitectos que diseñan los espacios en que nos movemos. Ningún campo de conocimiento es despreciable, porque os guste o no, nos necesitamos los unos a los otros para completar nuestro conocimiento y para seguir funcionando del modo en que lo hacemos.
Así que, en resumidas cuentas, dejad de tocarnos las narices a mí y a mis compañeros. En primer lugar porque nadie os ha pedido opinión, en segundo lugar, porque vuestras opciones no son más válidas que las nuestras, porque también nos necesitáis, y por último, porque todos estamos aprendiendo a desarrollarnos dentro de lo que nos hace más felices, ¿no? pues ea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario