Era obvio que Christian iría a la merienda de navidad de casa de Elena, y por supuesto que irá con otra chica. La sensación de ser reemplazable me hace tambalearme un instante, pero la descarto con facilidad; ni me debe nada ni es extraño que busque compañía, pero no puedo dejar de admitir que será un encuentro incómodo.
Por un momento jugueteo con la idea de no ir, pero eso sería cruel e injusto para con Elena. Raro en mí: quiero verla. Y a Roberto, las Anas y a Chema. Me tomaré un café, seré cortés, desearé felices fiestas a diestro y siniestro y poco más...
¿Verdad?
Y eso es una pedazo de actitud
ResponderEliminarPorque tú eres una crack ❤️