lunes, 30 de septiembre de 2013

And then, nothing.

Miro mi estuche. Está plagado de recuerdos del año más maravilloso que pasé en el Colegio Aljarafe. Están los nombres de mis compañeros y amigos, los peregrinos. Hay un perro hecho de típex blanco, y yo pienso en Ana, que pintaba esos perros amorfos por todas partes cuando te dabas la vuelta. Sobre la silueta del Skater negro está escrito mi nombre, también con típex. O, al menos, una variante de mi nombre. Es el diminutivo que menos me gusta, por decirlo de forma delicada..., pero no lo he borrado. Sé que debería limpiar el estuche, pero es lo único que me queda de S. Eso, y un puñado de papelitos con mensajes como "Tráeme mañana el texto de lengua. PD: sonríe, princesa". Creo que lo último lo ponía para que no lo mandara al carajo.
Pero, ¿cómo hacerlo, con lo que me gustaba? o eso era al principio, porque ahora es una obsesión en toda regla.
Letras mayúsculas, blancas e irregulares. Supongo que intenté forcejear con él cuando lo escribió. Supongo, también, que no luché con demasiada fuerza.
Él, que disfrutaba haciéndome sonrojar y utilizando mis mejillas luego de radiador. Él, que me tocaba el pelo cuando me hacía dos coletitas. Él, que fue el único a que le gustaron cada uno de mis cambios radicales. Él, que me abrazaba de cuando en cuando. Él, él, él. Él, que me sonreía. Que bailó conmigo. Él, que me miraba con falsa preocupación y se disculpaba con fingida sinceridad.
Y, a pesar de ello, estaba loca por él.
Y, sin embargo, no sé qué ha pasado. No sé qué he hecho mal.
No sé siquiera si debería volver a pensarlo. Probablemente solo sean estupideces que tan solo están en mi cabeza, y debería pasar página y pensar en otra cosa. 
Probablemente tampoco haga mucho caso de absolutamente nada de lo que estoy sugiriendo....

Scared of what.

Jaleo.
Noté cómo se me subían los colores de nuevo. Sentí el calor rebullendo en mi interior y quise meterme debajo de una piedra.
A nadie le gusta que conjeturen sobre lo que siente por otra persona.
Creo que él debió notarlo. "Kote". Se tensó a mi lado, como si me avisara de lo que iba a suceder a continuación.
Un tirón, una sacudida y después silencio.
Me concentré. No podía abrir los ojos, algo suave y rasposo al mismo tiempo me presionaba los párpados. Olía a polvo de albero. Olía al instituto, pero también a sol, a tabaco, a marihuana. Olía a sí mismo, de una forma que se me quedaba pegada en las manos cuando le acariciaba el pelo. También a desodorante masculino, a colonia, y a calor.
Cómo desvarío, como si pudiera percibirse tanto solo con una brusca inhalación.
Sus brazos fuertes, sus piernas bajo mi cuerpo en horizontal. Menos mal que tenía los ojos tapados, si no lo más probable es que me hubiera parecido a una locomotora de vapor humana, o algo parecido.
Estaba incómoda, pero no me hubiera movido por nada en el mundo.
Sabía que Kote estaba hablando, percibía el vaivén de su pecho y el ronroneo de su voz en mi espalda; pero no podía oír sus palabras, el corazón me atronaba los oídos.
Yo no lo disfruté mundo. Cuando todos se marcharon, Kote no me soltó. Fui yo la que le dije que me dejase. No recuerdo por qué lo hice, pero ahora me arrepiento. Ahora que no entiendo sus indirectas, ahora que no sé siquiera si somos conocidos. Ahora que le saludo y ni siquiera me mira.
Esos ojos, que creía conocer mejor que nadie, ahora son ojos de nadie. Ahora no sé qué quieren decirme.
Son solo unos ojos bonitos, y nadie se enamora de unos ojos.

viernes, 27 de septiembre de 2013

#NoEstoyEnferma

" If you don't understand mental illness, good. Good for you. You shouldn't have to understand.
If you don't understand why some people just can't get up from bed in mornings, good. I hope you jump uot of bed every single day; ready to take the world by storm.
If you don't understand how someone could drag a blade across their skin, good. I hope you never that desperate to feel something.
If you don't understand what would drive a girl to keep starving herself despite everything she is, lost in the proccess, good. I hope you stay heavy, I hope you to be happy with yourself.
If you don't understand why he wont just go to church, or rehab, or find someone who can help him, good. I hope you always have somewhere to turn.
If you don't understand how someone can keep swallowing botthles of pills, trying knots in clothes, or standing at the hops of bridges, good. I hope you never that desperate fot relief.
If you don't understand, good.
Your not supposed to.
It's all fucking sick.
Thanks god for ignorance, it's healthy."

Who? Why!

Las personas a las que quiero se pueden contar con los dedos de las manos. Siete personas. Solo esas..., de las cuales cinco están emocionalmente desechas, una está enferma y dos viven a cientos de kilómetros de mí.
Y luego vendrá el bienintencionado mundo y se preguntará por qué soy como soy.
Y yo solo sonreiré para aquellos que estén a mi lado.

Crawling

Pero, ¿qué sabréis vosotros de la desesperación? ¿alguna vez has tenido la sensación de que todo está perdido?
Da igual el camino que escojas, porque el final es bien visible. Solo que uno de los dos caminos es más prolongado. Una forma de no ver lo que nos esperas, con tanta curva como tiene el túnel.
¿Qué haces cuando crees que se acerca tu peor pesadilla? mejor dicho, ¿qué hago yo? ahora solo quiero llevarme las manos a la cabeza y relajar los músculos, cualesquiera que sean, que han mantenido el salado manantial de mis ojos callado, fluyendo dentro.
¿Conocéis acaso la desesperación del dolor? ¿la del sufrimiento emocional? ¿la de perder todo lo que os importa? ¿conocéis la soledad?
¡Oh, sí, recemos! ¡recemos y todo irá bien! ¿Toda mi vida se viene abajo y a ti solo se te ocurre pedirme que rece? ¡Si pudiera ver a vuestro Dios a la cara le escupiría! ¿dónde estaba él la primera vez que escuché a mi madre llorar? ¿dónde está cuando ella vomita? ¿dónde estaba hace unas horas, cuando escuchó ese definitivo "ya no podemos hacer nada por ti"? Vuestro Dios no apareció ninguna de las veces que lloré hasta dormirme porque creía que iba a perder el pilar en torno al que ronda mi vida. Dios no me palmeó el hombro en la sala de espera del hospital. ¿Y vuestro único recursos es decirme que vuestro bondadoso Dios la ha mantenido con vida? ¡Pues vaya vida! vida de horas y horas de cansancio y trabajo, vida de pobreza, vida de incertidumbre. ¿Quién quiere vivir para llorar entre cuatro paredes? ¿quién quiere la vida para consumirse entre unas sábanas? Somos muy egoístas y la apoyamos, le aconsejamos fuerza, le pedimos a todo lo pedible que ella no nos abandone. ¿Para qué? yo no aguantaría. Cuando me vaya, yo ya no sabré si sufren o no, ya no me importará. Yo no lo querría.
No voy a arrastrarme a ese Dios impasible vuestro, no voy a subirme a vuestra nube de chalados a que alguien "me escuche". No, lo que necesite, lo que haya que hacer, lo costearé yo por mis medios.
Se acabó que Dios se lleve mis méritos.
Esté o no esté, ¿qué importa? Como dijo Jace, estamos solos.
Solos.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

No-normal.

Ya no veo a mis amigas como tales, ya no.
Ya no salto a sus brazos, ni las echo de menos como antes.
Ya no veo nuevas amigas en las personas que me caen bien,
solo a gente manipulable..., o manipuladora.
Ya no sé tratar con la gente.
Hacer chistes, echar piropos o reír de forma natural.
He perdido práctica en este juego que es socializar.
He perdido mi posición manipulable, ahora soy yo quien mueve las piezas,
porque ahora sí que me doy cuenta de las cosas.

Y ya no necesito a nadie para ser feliz.

No, ¿verdad?

Me da igual quién llegue, de verdad. Me da igual si es un hada llamada Felurian, que lleva miles de años sin verse. Me da igual si viene Élodin, o si es un sacerdote del templo Blanco y Negro. Puedo incluso aprender el Lethani. Solo necesito uno de esos personajes que viven en los libros y tienen por costumbre hacer preguntas extrañas y estar un poco locos. Alguien que imbuya un poco de decencia y alguna que otra respuesta en este adormilado y retorcido cerebro mío, ¿no? aunque yo sola tenga que encontrar la respuesta.
En otras palabras, necesito alguien que me oriente un poco.
Quizá así suceda como en los libros, y al menos tenga las cosas claras. Mi siquiera necesito quedar por encima de los demás.
Pero eso no va a ocurrir, porque Felurian no existe, ni Élodin, ni yo soy Arya, ni nadie me va a ayudar en esta vida. ¿A que no?