jueves, 28 de febrero de 2013

Y por último...

Parece que nadie se da cuenta de cuánto os necesito ahora. Un abrazo, lo que sea. No culpo ni menciono a nadie, hay cosas mil millones de veces más importantes y urgentes que yo.
Por suerte, todavía puedo dar un paseo.
Al salir de casa de Jess, solo quería llegar a casa lo antes posible. Sentía las manos entumecidas y el cuerpo entero me hormigueaba pero al acostumbrarme a la sensación...¿qué? Me di cuenta de que no tenía ninguna prisa por volver.
Así que cambié de carpeta, porque no quería volver a sentirme sola nunca jamás. Ahora ya no tengo amigas para que me decepcionen. Tampoco tengo a esa persona por la que sonreír, llorar, alguien con quien soñar hasta despierta. Tengo a mi familia, sí, pero...pero...
Suspiré. Andy Biersack me dijo palabras bonitas al oído, pero, ¿por cuánto tiempo sería eso suficiente? El vaho de mi aliento se desdibujó en la gélida noche de febrero. Las estrellas no me dieron la respuesta. Los puños ocultos en mi cazadora estaban crispados, y los ojos me escocían sobremanera.
"No estás sola" susurró uno de mis cantantes favoritos en mi oreja.
<< Lo sé >> repuse yo para mis adentros.

Y sientes que no encajas con nada.

Que no tienes lugar en ninguna parte. Que eres tonta y fea. Incluso la cigüeña se equivocó contigo, y tú tendrías que estar en algún lugar de Asia. Allí por lo menos te sentirías comprendida.
Aunque siempre existirán buenos amigos. Jess, Jefa, Eddie, Ross, Ézhor...¿qué más quiero yo?

A veces quieres rendirte.

Y aunque puedes, sabes que no es una opción.
¿Por qué siento que estoy decepcionando a todo el mundo?
¿Por qué siento que me muevo por las ideas de otras personas?
¿Por qué diantres me someto a voluntades ajenas?
¿Por qué todo lo "correcto" me hace sentir tan triste?
¿Por qué ya nada despierta en mí mis ilusiones febriles?
¿Por qué me cuesta cada vez más fingir que soy feliz y que todo es maravilloso?
¿Por qué ni siquiera me apetece estudiar?
¿Por qué mis amigas son tan falsas y tan malas?
¿Por qué ese punto me hace tanto daño?
¿Por qué se suceden las broncas?
¿Por qué finjo que no me importa cuando eso es mentira?
¿Por qué le echo tanto de menos aunque pase el tiempo?
¿Por qué odio tanto cada centímetro de mí misma?
¿Por qué siento que soy una mentira por completo?
¿Por qué me siento avergonzada de mis propios pensamientos?
¿Por qué no puedo dar respuesta a ninguna de estas estúpidas preguntas retóricas?

Solo lo sueño.

Y vendrás a buscarme con tu moto y tu sonrisa bonita, volverás a rescatarme de este infierno con tus ojos verdes y tus abrazos cálidos. Entonces me dirás esas palabras que siempre me hacen sentir mejor cuando no queda nada más en mi vida. Y me llevarás a un sitio donde no haya responsabilidades ni broncas, donde no tenga que ir a clase, ni existan la familia o los amigos. Simplemente tú y yo, con todas esas promesas que nos hicimos por delante, por cumplir, simplemente me harás feliz.

martes, 26 de febrero de 2013

No, si yo no me voy a enfadar...

Me limitaré a marcharme, y a llevármela conmigo. Cogeré su mano, y sé que me va a hacer caso, porque yo nunca le haría daño. Y luego ambas pondremos música y yo cantaré las letras en coreano mientras ella imita a la perfección sus coreografías. Simplemente, seremos Cristinanayabel, ella y yo contra el resto del mundo, como siempre debió ser.
Y así nadie nos hará daño.

Never give in.

-NO ME VUELVAS A HACER ESTO JAMÁS.
Recogí mis libros parsimoniosamente y los apilé en mi escritorio, cansada. ¿Ahora qué?
-No sé a qué te refieres-murmuré.
No le encaré en ningún momento. Me asustaba su expresión enfadada.
-¡Llevas días sin aparecer por ninguna parte! ¡Y yo preocupado!
-Oye, lo siento-Le espeté. No tenía por qué dar explicaciones a nadie y eso me enfurecía.- Estaba estudiando, ¿vale? Tengo un examen de trigonometría.
-Ya.- Repuso, cortado, con un silencio hosco.
Apoyé las manos en la mesa, a mis espaldas, y escruté sus facciones, algo enternecida.
-Dragón.
-¿Hm?
-...Te he echado de menos.
¿Se le estaban humedeciendo los ojos? De cualquier modo, estaba conmovido. Yo lo sabía.
-Te quiero-susurró.
-Lo sé.
Él se acercó lentamente, con movimientos sinuosos, y apoyó sus manos junto a las mías, por lo que su rostro quedó sorprendentemente cerca.
-No sabes cuánto...
Su voz flotaba dulcemente en la estancia. El aire estaba cargado de una tensión casi palpable.
-Hagamos las paces.-sugerí con una media sonrisita insinuante.
Entrelacé mis dedos con los suyos y tiré de su cuerpo para que me siguiera hasta el dormitorio.

lunes, 18 de febrero de 2013

Leave it

No hay que ser un soldado para sentirse cansado y herido. Especialmente en esta lucha que no tiene final.
No es necesaria la adolescencia para caer en las redes del amor, ni la vejez para haber vivido mucho.
Tampoco por estar confundidos somos todos idiotas.
Así que hagámonos un mutuo favor y vivamos la vida sin juzgar tanto a los demás. Por decoro y respeto, no incluiré dónde podéis meter vuestra preciosa lengüita. Si dejáis a cada cual con lo que sienta, todos seremos más felices.
Ea, Au revoir. Corea forever y esas cosas.

¿Por qué estoy tan pendiente de cada uno de tus movimientos?

Solo sal de mi cabeza, ¿Quieres?

Just Stop.

Solo hay demasiado que pensar, que analizar, y muy poco tiempo para hacerlo. Números inútiles y formulas sin sentido absorben por completo mi pensamiento, ¿O no?
La clase de matemáticas es solo un borrón oscuro y aburrido, oigo el parloteo de la tutora, oigo la lluvia caer, oigo a mi compañero llamar mi atención...¿Pero escucho algo?
Te echo de menos. ¿De qué sirve concentrarse en nada? No voy a volver a dormir a tu lado con eso. Ni a matar zombies en la playstation sentada sobre tus rodillas. No voy a escucharte tocar la guitarra, cantando baladas de amor.
No consigo concentrarme, los recuerdos, húmedos y salados, se deslizan por mis mejillas, me impiden ver siquiera bien....

Mamá.


Las sombras, alargadas y grises, mordieron sus prominentes huesos. Las sombras son mis enemigas, van de la mano del tiempo, y ambas luchan contínuamente por atraparme. Yo sujeto su mano entre las mías. Una mano pequeña y morena, frágil, huesuda. Dibujo círculos en el dorso con mi pulgar, parece que tengo unas manazas enormes. Sus pestañas aletean, una y otra vez, una y otra vez. Me rompe el corazón ver sus esfuerzos por mantenerse despierta; como tantas otras cosas lo hacen...
Así que llevo mis dedos a su pelo, enredándome en los suaves mechones negros, acariciando con las uñas el cuero cabelludo. Así, sus párpados se desploman de una vez por todas sobre el iris negro y las dilatadas pupilas. Incluso dormitando, su respiración es ligera y superficial. Su ceño permanece arrugado, sus rojos labios firmemente cerrados, crispados los rasgos de su hermoso y delgado rostro, cetrina su piel morena. Sus dedos aferrando mi mano libre.
Comienzo a entonar una nana. Primero con letra, luego solo con voz. En realidad es una simple canción que encuentro muy relajante. Incluso sin el piano de fondo suena bien. En voz baja y grave, con tonos sencillos y repetitivos, le repito una y otra vez la melodía. Hasta que su rostro es una máscara tranquila y su pequeña mano languidece inerte bajo la mía. Con los labios entreabiertos, ella trata de dar forma a las burbujas de aire que son las palabras. Pero está dormida, y yo sigo cantando hasta que deja de luchar con el sueño. Me gusta estar sola con ella.
Ahora puedo entender muchas cosas. Puedo dejar de hacer preguntas que, ahora entiendo, son meramente retóricas. Puedo comprender aquella escena que tanto se repetía en mi infancia, cuando yo le exigía una promesa, la de permanecer siempre a mi lado. Ella, invariablemente, ponía la mano sobre mi corazón, y su respuesta era siempre la misma: "Aunque no esté contigo, siempre velaré por ti. No te abandonaré."
Puedo entender por qué el monitor protesta con sus rechinantes y estridentes pitidos cada vez que ella trata de incorporarse. Y que una cara seria significa que algo no va bien. Puedo entender por qué a veces no despierta en muchos días, y que en algunas ocasiones no sepa quién soy yo.
Puedo entender que no me queda mucho tiempo, y no solo me refiero a esta lluviosa tarde de Noviembre.
La melodía se extingue en mis labios, y los enormes ojos negros se abren, pavorosos. Desenfocados, ciegos, ajenos a este mundo.
-No me dejes nunca- gime con voz ronca.
Yo me inclino a su lado, coloco su cabeza de modo que pueda oír mi corazón. No sé si me lo pide a mí. No sé si sabe dónde estamos. En cualquier caso, vuelve a relajarse.
Agradezco mucho el haber crecido. No solo para entender las cosas tristes. También, echando la vista atrás, soy consciente de lo fuerte que ha sido ella solo por mí.Cuando se escondía a llorar. Cuando tuvo miedo por ella misma. Sonreía sin rendirse. Amo esa preciosa sonrisa suya, me llena de calidez el pecho y de lágrimas los ojos.
Por eso, mamá, estés donde estés cuando leas esto, quiero que lo sepas. No solo que eres la persona más increíble que he conocido. No solo que te admiro. Si no que jamás voy a rendirme, haga lo que haga. Te lo debo. Jamás voy a abandonarte, porque hasta cuando no estoy a tu lado velo por ti. Que te echo de menos cada instante que no estás cerca de mí. Tu vocecilla, tu sonrisa, el calor de tus abrazos. Poder espachurrarte sin que te partas en dos. El correteo escaleras arriba de los domingos por la mañana, tantos años atrás. Cocinar escuchando La Oreja de Van Gogh. ¿Tú también lo echas de menos?
Los mejores momentos de mi vida han sido a tu lado. Gracias por eso, mamá. Por no rendirte, por no abandonarme, fiel a tu promesa. Por seguir sonriendo, pase lo que pase. Por quererme, por cuidarme. Ser mi consejera, mi fuente de inspiración, mi motivo para seguir viva y ser feliz.
Gracias por ser mi todo.
Te quiero mucho, mamá.

domingo, 17 de febrero de 2013

It's do or die.

No creo que pueda poner la letra ahora o siquiera traducirla. Solo me encanta, me emociona, la adoro.
Gracias, Andy.

Differences.

Había todo tipo de reacciones a la presencia de Helena. Los estudiantes más jóvenes la miraban con miedo, los mayores con desdén. Algunos solo con asco. Y siempre había algún curioso.
Ella, indiferente, mantenía la vista fija al frente, buscando, esperando algo. El hecho de que todos la juzgasen sin saber le revolvía el estómago. Nadie sabía ver más allá de su ropa negra, sus pulseras, cruces y cadenas.El maquillaje oscuro endurecía mucho sus facciones juveniles, cada mechón de su oscuro y corto cabello señalaba en una dirección distinta. Ella tampoco invitaba a la cercanía, de brazos cruzados, apoyada contra la puerta doble del instituto. A pesar de todo, su rostro redondeado, sus mejillas rojizas y esa mirada huidiza que la caracterizaba hacían pensar a uno que ella era inofensiva y tímida.
Una moto negra, grande y brillante se detuvo con un fuerte rugido frente a ella. La joven levantó la mirada y echó a andar hacia el imponente vehículo. Se sentó detrás y se abrazó a la cazadora de gastado cuero negro del conductor, que le pasó su propio casco, revelando una larga cabellera teñida de rojo y azul. Helena se lo puso sin rechistar y él arrancó.
Siempre le había gustado la sensación de libertad de montar en moto. Esa ingravidez, el cosquilleo, su potente rugido.
Pasado un rato, ella llamó su atención con un toquecito.
-¡Para aquí!.- gritó para hacerse oír.
El chico asintió y se aproximó a la acera, frente a un edificio de piedra y madera de aspecto decrépito.
Helena se bajó de la ronroneante moto y le devolvió el casco a su acompañante.
-Gracias por traerme, Miky.
-Nada, peque. ¿Este viernes te vienes con nosotros?
-Ya veré.-repuso ella evasivamente.
-Sue va a llevar su cachimba. Yo voy a comprar el lote con Sico.
-Voy, pero de gratis.
Helena casi sintió pereza, aunque lo cierto es que, de no ser por sus reuniones nocturnas de los fines de semana, estaría totalmente desconectada de la comunidad Heavy.
Miky rodeó su cintura con un brazo y la atrajo hacia sí, besando sus labios con ternura unos instantes. Fue Helena quien se separó de él, y sin más palabras, se internó en el edificio.
Un silencio sepulcral se instalaba entre las estanterías de oscura caoba. Al aproximarse al mostrador de la librería, Helena sintió miradas de reproches en el silencio tenso. Ni el susurro de las hojas de los libros al pasarse se escuchaba tras su entrada.
-Buenas tardes, Helena
El bibliotecario, un ancianito de mirada amable, era una de las pocas personas de aquel sucio mundo que no trataba a la joven como si fuera una bomba a punto de estallar.
-Hola, señor Burnlight.
-¿Has acabado ya con la obra de Wilkie Collins?
La chica extrajo un grueso ejemplar de "La Dama de Blanco" de su mochila y se lo ofreció.
-Maravillosa como poco-sentenció Helena con una mirada de cariño.-¿Qué me aconsejas hoy? Busco algo de Jane Austen.
El hombre rebuscó en los archivos y desapareció entre unos estantes. Regresó unos minutos después, quitando el polvo con mimo de un tomo de Mansfiedl Park.
-Perfecto.
Helena le dedicó una de sus escasas sonrisas al bibliotecario mientras guardaba el libro. Luego se despidió con un gesto y se fue de allí.
Un par de horas más tarde, un autobús dejaba a Helena en Bellavista. El gesto de la chica se ensombreció mientras subía las escaleras de la entrada principal. Todo el mundo la dejaba pasar a donde quiera que fuera aunque se saltase todos los horarios, si no por miedo, al menos por ser la hija del jefe. Ascendió las escaleras de la UCI de dos en dos, se puso unas de las incómodas batas de papel verde y el resto de la parafernalia.
Tocó delicadamente la puerta de cristal del Box número 13. La recibió el silencio. Alrededor de la cama, mucho cableado e instrumentales blancos. Una ventana sellada, un carrito con gasas, jeringuillas y alcohol y algunas papeleras eran todo el mobiliario de la habitación. Y entre las sábanas, aunque nadie lo diría, una persona. Menuda y encogida, alzó su rostro delgado de piel cetrina al oír el susurro de la puerta al deslizarse. Compuso una débil sonrisa al verla allí y graznó algo que sonaba a su nombre, Helena. La chica sintió el habitual pinchazo de angustia y miedo al tocar sus manos, al sentir sus huesos bajo la piel, tan fría...
El sol escupía su fuego por doquier en el cielo, sus rayos dibujaban extrañas siluetas en las paredes. Sin embargo, las sombras ganaban terreno, ya no era posible adivinar cada mota de polvo en los haces de luz.
-Hoy te he traído un libro de Jane Austen, mamá-musitó Helena con voz dulce.
La mujer cerró los ojos con un suspiro agotado e incrementó la fuerza con que estrechaba los dedos de la chica. En sus blancas manos se adivinaban cardenales de tanto estrechar las de su madre. Helena comenzó la lectura, y la lenta cadencia y el vaivén de su voz llevaron a su madre a un inquiero duermevelas, musitando incoherencias.
Así, en soledad, terminaba otro día más en la vida de Helena.

Façade

Nadie sabe qué es lo que ha sido de ella, una muñeca destrozada y desesperada. Oh, tan inocente y delicada..., pero muy terca y obstinada como para rendirse.
Destrozada, herida otra vez, nunca termina. Asustada y temblando...¿Se cayó otra vez? ¿Un accidente? Sus ojos rodeados de negro otra vez. ¡No puedo creer que ella siga con él!
¿Por cuánto tiempo lo vas a intentar? ¿Cuánto, hasta que te vayas lejos? Tu fachada no puede ocultar el hecho de que estás en la miseria.
Mira dentro de ella, mira en qué se ha convertido. Escondiéndose en sí misma otra vez, ¿No podrá levantarse sola de nuevo? Tan solo es muy difícil y arduo de hacer...
Homicidio destella a través de su mente otra vez, no más dolor, tomar el control..., si él levanta su mano otra vez, ella encontrará su libertad en matarlo. ¡El mundo verá que ella ya tuvo suficiente!
¿Durante cuánto tiempo lo vas a negar? ¿Cuánto, hasta que te vayas lejos? ¿Por cuánto más lo vas a intentar? ¿Cuánto tiempo, hasta que te vayas lejos? Por la mirada de tus ojos, ¡Sé que sangras internamente!

All you want is to criticize

Solo deja tus críticas sin fin sobre mi vida. Solo deja de juzgarme e involucrarte en mi vida. Detente un momento y contempla el milagro empezar en nuestra vida. No detengas este instante, y deja que ocurre sabiendo que...
Todo lo que quieres es criticar, algo para nada; y todo lo que yo quiero es el perdón una vez más, para ser la mejor en el mundo.
Solo termina tus pequeños problemas con mi vida, ya basta de este dolor paralizado que sentimos dentro. Detente un momento y recuerda el comienzo del milagro de nuestra vida, llévate el momento, que no podremos disfrutar, sabiendo que...
Todo lo que tú quieres es criticar, algo para nada, y todo lo que quiero es el perdón una vez más. Yo sé que todo lo que queremos es sentir algún tipo de consuelo en nuestro interior, y que todo lo que hemos hecho no lo podemos negar...¡Seremos los mejores en el mundo!
Todo lo que siempre quise es ser una fuente de compasión, para el momento en el que sentíamos que nos ahogábamos

martes, 12 de febrero de 2013

Animal I have become.

No puedo escapar de este infierno.
Tantas veces lo he intentado....
Pero aún estoy atrapada dentro.
Que alguien me ayude a través de esta pesadilla.
No puedo controlarme a mí mismo.
¿Y qué su puedes ver la oscuridad dentro de mí?
Nadie va a cambiar nunca este animal en que me he convertido.
Ayúdame a creer que esta no es la "yo" de verdad
Que alguien me ayude a ocultar esta bestia en que me he convertido...

Over and over...

I feel it everyday, it's all the same..., it bring me down, but I'm the one to blame. I've get everything to get away...
So here I go again! Chasing you down again! Wy do I do this?!
Over and over, over and over I fall for you. Over and over, over and over I try not do...
It feels like everyday says the same...it's dragging me down and I can't pull away! So many thoughts that I can't get out of my head..., I try to live without you, but everytime I do I feel dead. I know what's best for me, but I want you instead..., I'll keep wasting all my time...

lunes, 11 de febrero de 2013

I hope...

Don't know what's going on...I don't know what will wrong....Feel like a hundred years, I still can't believe you're gone. So I'll stay up all night, with these bloodshot eyes, while these walls surround me with the story of our lifes...
I feel so much better, now that you're gone forever. I tell myself that I don't miss you at all. I'm not lying, denying that I feel so much better...now...that youre gone...forever...
Now things are coming clear, and I don't need you here...And in this world around me, I'm glad you dissapeared. So I¡ll stay our all night, get drunk and fucking fight, until the morning comes I'll forget abour our life.

Die regretting the time you lost.

Seize the day, or die regretting the time you lost. It's empty and cold without you here, to many people to ache over...
I see my vision burn, I feel my memories fade with time, but I'm too young to worry...
These streets we traveled on, will undergo our same lost past? I found you here, now please just stay for a while, I can move on with you around.
I hand you my mortal life, but will it be forever? I'll do anything for a smile, holding you until our time is done, we both know the day will come, but I don't wanna leave you...
Newborn life replacing all of us, changing this fable we life in, no longer needed here so where do we go? Will you take a journey tonight, follow me past the walls od death? But boy, what if there is no eternal life?
Trials in life, questions of us existing here. Don't wanna die alone, without you here, please tell me what we have is real.
So what if I never hold you or kiss your lips again? So I never want to leave you and the memories of us to see...I beg don't leave me...
Silence, you lost me, no chance for one more day. I stand here alone, falling away from you, no chance to get back home...

sábado, 9 de febrero de 2013

Me gusta.

Que lo primero que vea al despertar sea su rostro. Me gustan sus "Te quiero muchísimo, ¿lo sabes?" y todas esas formas de llamarme que se le ocurren. Sus ojos, su voz, sus abrazos, que baile conmigo. Me gusta todo este tiempo a su lado, acostumbrarme a él como si no hubiera habido otra cosa en mi vida.
Aunque dude, me ponga celosa sola. Aunque me enfade a veces, la realidad es que siempre estoy esperándole las horas que hagan falta. Aunque me duela todo el cuerpo y me caiga de sueño, da igual si solo voy a dormir dos o tres horas.
Supongo que no hay gran cosa que añadir, salvo que le quiero más que a mi vida.
Eres un babo, osito.

domingo, 3 de febrero de 2013

Siempre ha estado ahí.

Cuando nadie más quedaba para decirme lo importante que era. Yo tampoco podía más. También a mí me estaba doliendo mucho.
Entonces, entonces me rodeó con sus brazos. Muy fuerte, casi temblaba. Y no podía respirar, pero eso era muy agradable. Como sentir sus labios en mi piel y sus dedos acariciando mi mejilla para borrar la senda de lágrimas. ¿Por qué seré tan llorona? Nunca he podido ser fuerte delante suya.
Tampoco es necesario. Nunca cuelan mis excusas. Siempre aparece con sus brazos y su sonrisa bonita.
Siempre quise ser alguien de quien él pudiera estar orgulloso. He tardado mucho en darme cuenta de que él me va a querer siempre, aunque sea tonta y débil, mientras sea yo misma.
Yo solo puedo seguir viviendo si formas parte de mi vida, tonto.